Instrucciones para una vida feliz

noviembre 23, 2018

Una pequeña selección de frases cortas obtenidas del libro motivacional de H.Jackson Brown Jr. «Life’s Little Instruction Book». Este bestseller fue publicado por primera vez en 1991 en el primer volumen de sus pequeñas reflexiones.

He seleccionado algunas de mis favoritas:

Felicita a tres personas cada día.
Recuerda los cumpleaños de los demás.
Mira a la gente a los ojos.
Di «gracias» a menudo.
Di «por favor» a menudo.
Sé el primero en decir: «Hola».
Vive por debajo de tus posibilidades.
Compra libros grandiosos, incluso si nunca los lees.
Perdónate a ti mismo y a los demás.
Devuelve todo lo que pidas prestado.
Trata a todo el mundo como quisieras ser tratado.
Haz nuevos amigos pero aprecia a los antiguos.
Escribe de vez en cuando notas de agradecimiento.
Da gracias antes de cada comida.
Sorprende a tus seres queridos con pequeños regalos inesperados.
Deja de culpar a los demás. Asume la responsabilidad de cada área de tu vida.
Ahorra un diez por ciento de lo que ganes.
Saca lo mejor de las malas situaciones.
Acepta siempre la mano tendida.
Admite tus errores.
No cometas el mismo error dos veces.
Sé valiente. Incluso si no lo eres, simula serlo. Nadie conoce la diferencia.
Tu mente sólo puede tener un pensamiento a la vez. Que sea uno positivo y constructivo.
No pases por alto las pequeñas alegrías de la vida mientras buscas las grandes.
No des la salud por sentada.
Se humilde y cortés, pero no dejes que nadie te empuje.
No pienses que puedes relajarte en tu camino a la felicidad. La felicidad es resultado de un hacer.
No engañes.
Sonríe mucho. No cuesta nada y no tiene precio.
Da una caminata rápida de treinta minutos todos los días.
Levántate media hora antes. Hazlo durante un año, y habrás añadido siete días y medio a tu vida.
No pierdas el tiempo lamentándote por los errores del pasado, aprende de ellos y sigue adelante.
Define tus prioridades. Nadie dijo jamás en su lecho de muerte: ‘Vaya, si hubiera pasado más tiempo en la oficina’.
Da a las personas una segunda oportunidad, pero nunca una tercera.
Practica la empatía. Trata de ver las cosas desde los puntos de vista de otras personas.
Juzga tu éxito en la medida en que disfrutes de paz, salud y amor.
Aprende a escuchar. Las oportunidades a veces tocan muy suavemente.
Deja todo un poco mejor de cómo lo encontraste.
Vive tu vida como una exclamación, no como una descripción.
Relájate. A excepción de rarezas de la vida y asuntos de muerte, nada es tan importante a primera vista como parece.
Nunca cortes lo que puede ser desatado.
Nunca subestimes el poder de cambiar a los demás. Nunca subestimes el poder de cambiarte a ti mismo.
Recuerda que el éxito de la noche a la mañana por lo general toma alrededor de quince años.
Recuerda que los ganadores hacen lo que los perdedores no quieren hacer.
Busca oportunidad, no seguridad. Un barco en el puerto está seguro, pero con el tiempo su fondo terminara por podrirse.
Mantén los gastos bajos.
Mantén las expectativas altas.
Acepta el dolor y la desilusión como parte de la vida.
Ve los problemas como oportunidades para el crecimiento y la auto-maestría.
Dedica menos tiempo a preocuparte por quién tiene la razón, y más tiempo a decidir que es correcto.
Deja de culpar a los demás. Asume la responsabilidad de todos los aspectos de tu vida.
El éxito es conseguir lo que quieres. La felicidad es querer lo que obtienes.
La importancia de la victoria no es lo que obtenemos de ella, sino en que nos convertimos a causa de ella.
Cuando te enfrentes a una tarea difícil, actúa como si fuera imposible fracasar.
Nunca subestimes el poder del amor.
Nunca subestimes el poder del perdón.
No aburras a la gente con tus problemas. Cuando alguien te pregunte cómo estás, di “genial, nunca he estado mejor”. Cuando te pregunten cómo va el trabajo, “excelente, mejorando cada día”.
Aprende a estar en desacuerdo sin ser desagradable.
Se discreto. Nunca molestes a nadie a propósito.
Escucha a ambas partes antes de juzgar.
Abstente de envidiar. Es la fuente de mucha infelicidad.
Se cortés con todo el mundo.
No digas que no tienes tiempo suficiente. Tienes exactamente el mismo número de horas por día que tenían Helen Keller, Pasteur, Miguel Ángel, la Madre Teresa, Leonardo da Vinci, Thomas Jefferson y Albert Einstein.Cuando no tengas tiempo para una tabla de ejercicios completa, haz flexiones.
No te demores en actuar cuando tengas una buena idea. Es probable que alguien más haya pensado en ello. El éxito llega a aquel que actúa primero.
Ten cuidado con las personas que te dicen lo honestos que son.
Recuerda que los ganadores hacen lo que los perdedores no quieren hacer.
Vive tu vida como una exclamación, no como una explicación.
En lugar de utilizar la palabra, «si hubiera», trata de sustituirla por «la próxima vez».
En lugar de utilizar la palabra «problema», trata de sustituirla por «oportunidad».
Abrete a nuevas ideas.
Se atrevido y valiente. Cuando mires hacia atrás, te arrepentirás de las cosas que no hiciste más quede las que hiciste.
Nunca pierdas la oportunidad de decirle a alguien que le amas.
o te pierdas la magia del momento por centrarte en lo que está por venir.
Júzgate por tus propias normas, no por las de otra persona.
Esté ahí cuando la gente te necesite.
No te apresures al tomar una decisión importante. Los demás entenderán que digas: “Me gustaría tener tiempo para pensar, ¿puedo contestar mañana?”
Ten decisión, incluso si esto significa que a veces te equivoques.
No dejes que nadie te convenza de abandonar lo que sabes que es una gran idea.
Prepárate para perder de vez en cuando.
No fastidies el momento de otras personas.
Sabe cuándo guardar silencio.
Sabe cuándo hablar.
Sólo para ver cómo te sientes, abstente de criticar a nadie ni a nada durante veinticuatro horas.
Se leal.
Entiende que la felicidad no se basa en posesiones, poder o prestigio, sino en las relaciones con la gente que amas y respetas.
Felicita incluso los más mínimos logros.
No hagas alarde de tu éxito, pero tampoco te disculpes por ello.
Se entusiasta con el éxito de los demás.
No pospongas las cosas. Haz lo que haya que hacer cuando haya que hacerlo.
Ríete mucho. Un buen sentido del humor cura casi todos los males de la vida.
No tengas miedo de decir «no sé».
No tengas miedo de decir ”cometí un error».
No tengas miedo de decir “necesito ayuda».
No tengas miedo de decir “lo siento.»
Cuando te sientas genial, que se te note en la cara.
Ama profunda y apasionadamente. Puedes salir herido, pero es la única manera de vivir la vida completamente.
Recuerda que todo el mundo tiene miedo de algo, ama algo, y ha perdido algo.
No pases por alto las pequeñas alegrías de la vida mientras buscas las grandes.
Vive simplemente. Piensa rápidamente. Trabaja con diligencia. Da generosamente.
Ama profundamente.

Autor: H. Jackson Brown Jr.

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